Con la conformación de la Federación de Cámaras de Extrusado, se plantean el objetivo de hacer valer su condición de «libre de solventes». El tema será abordado en el 7° Congreso Internacional del sector, el próximo 5 de octubre en la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
En el encuentro, que este año será en la Bolsa de Comercio de Santa Fe, los empresarios de ambas provincias presentarán la conformación de la Federación de Cámaras del sector, a la que esperan sumar próximamente a sus pares de Córdoba y Buenos Aires.
«Lo más importante es anunciar la Federación», anticipó Marcelo Conde, presidente de Cámara Industrial de Extrusado y Prensado Santa Fe, quién estimó que cuando logren incorporar a los cordobeses y bonaerenses sumarían más del 80% de las plantas del país. «Calculamos que el año que viene los vamos a tener dentro», estimó.
Además de ser el primero que se organiza en conjunto, por primera vez el evento contará con la presencia de la máxima autoridad nacional de la agroindustria, ya que está confirmada la presencia del Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo. La alianza se afianzó de tal modo que ya definieron que en 2024 el congreso será en Paraná, por primera vez fuera de Santa Fe.
«Los primeros objetivos que tenemos es que tanto el expeller como el aceite sean separados de las grandes industrias, porque nosotros no usamos y somos libres de solventes», indicó el santafesino. Y añadió: «y si se puede el día de mañana fomentar la exportación».
Al ser consultado sobre alguna ventaja competitiva en el mercado internacional que pudiera significar el proceso de prensado sin solvente, Conde sostuvo: «hay mercados puntuales que los requieren, como EE.UU.». Sin embargo advirtió que hoy la brecha cambiaria los complica para impulsar este objetivo. Por ejemplo, mencionó que las firmas elaboradoras de soja texturizada (un aditivo para la industria alimenticia) «la han pasado mal», porque venden su producto al dólar oficial pero la soja (materia prima) deben adquirirla al «dólar soja». Por eso opinió: «no es año todavía para arrancarlo» al objetivo de abrir mercados.
De todas formas, adelantó que el gobierno nacional y el INTA vienen trabajando «para que sean productos independientes, separados en el nomenclador», tanto el expeller como el aceite que elaboran los extrusores. «Se hicieron todos los estudios; viene aprobado lo de la soja y el aceite también porque es libre de hexano, es un trabajo a largo plazo», aclaró.
Respecto del momento que atraviesa el sector, compuesto de pequeñas industrias de prensado, lo calificó como «malo«, a causa de los desajustes macroeconómicos y el impacto de la sequía «que terminó de complicar, porque la falta de mercadería hace que la mayoría estemos trabajando a menos de la capacidad, dado que se complica conseguir soja hoy». Y añadió: «si hubiera soja estaríamos al 100%, pero estamos en promedio al 60%».
Sobre la incidencia de los tipos de cambio diferenciales, Conde indicó que si bien el precio de la soja «nos complica a nosotros», una dificultad extra es que impacta mucho más entre sus clientes, especialmente el sector tambero. «La leche no sube», dijo, a diferencia de la carne y el pollo. «Nos termina complicando desde ese lado, tenemos clientes en situación crítica: con una leche de 120 pesos y una expeller de 200″, señaló, cuando históricamente valen lo mismo o con oscilaciones del 10%. «Podríamos tener un valor del expeller más bajo pero no se puede, dado que el aceite se vende a dólar de $350 y la soja se compra al de $450″.
Sin embargo este factor no hace que disminuya la demanda. «No es un problema en sí», explicó, porque más allá de que los números no les cierran a los tambos, «no pueden bajar el consumo», sobre todo ahora por la falta de alimento en los establecimientos a causa de la sequía. Pero tampoco se los puede financiar, porque la tasa de descubierto en bancos es 130% y hace que quien paga a 60 días tiene 20% de recargo. Mientras que «ellos cobran a 45 días sin recargo».
Finalmente, sobre el 7° Congreso Intencional de Extrusores del próximo 5 de octubre, al que ya hay unos 200 inscriptos, adelantó que tendrá dos ejes: uno orientado a la producción, el mantenimiento de maquinaria o el rendimiento de energía; y el otro enfocado a la innovación en el sector, por ejemplo sobre los pasos de elaboración siguientes al expeller (extrusado, texturizado, proteína by pass, pellets de madera para generar energía). También desde la Nación comunicarán algunas líneas de fomento para el sector.