Se celebra hoy el primer «Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos», proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de diciembre de 2018, con el objetivo de llamar la atención e inspirar acciones que ayuden a prevenir, detectar y gestionar los riesgos transmitidos por los alimentos.
La inocuidad de los alimentos es la ausencia -a niveles seguros y aceptables- de peligros que puedan dañar la salud de las y los consumidores. Solo los alimentos inocuos satisfacen las necesidades alimentarias y contribuyen a que todas las personas tengan una vida activa y saludable. No existe seguridad alimentaria sin inocuidad de los alimentos.
Los peligros transmitidos por los alimentos pueden ser de naturaleza biológica, química o física y con frecuencia son invisibles a nuestros ojos. Se tratan de bacterias, virus, parásitos o sustancias químicas perjudiciales (por ejemplo: residuos de pesticidas).
De esta manera se apunta a mejorar la seguridad alimentaria, la salud humana, la economía, la agricultura, el acceso a los mercados, el turismo y el desarrollo sostenible.
Esta campaña, orientada a la acción, promoverá la concientización mundial sobre la inocuidad de los alimentos y apelará tanto a las autoridades nacionales como al sector privado, sociedades civiles, organizaciones de las Naciones Unidas y al público en general, a que tomen medidas decisorias sobre este tema.
El lema inaugural nos invita a reconocer que la seguridad e inocuidad alimentaria es asunto de todos. La forma en la que los alimentos se producen, almacenan, manipulan y consumen, repercute en nuestra alimentación. Es por ello, que se invita a todas las personas a destacar que todos los involucrados en los sistemas alimentarios tienen un papel importante a desempeñar.
Este día internacional ofrece la oportunidad de resaltar los esfuerzos realizados para garantizar que los alimentos que comemos no nos enfermen. A lo largo de la cadena alimentaria, todos somos responsables de la inocuidad de los alimentos
